Nacionales - 22-10-2024 / 10:10
HARTAZGO SOCIAL Y ESCRACHES PARA LOS SOCIOS EN EL AJUSTE
Milei cenó con gobernadores peronistas que lo ayudaron con el veto, traicionando a las universidades
A un mes del asado con "los 87 héroes" que votaron contra un miserable aumento a los jubilados, Javier "el Loco" Milei convocó a una cena en la Quinta de Olivos a cuatro gobernadores traidores del peronismo que lo ayudaron a convalidar el veto a la ley de Financiamiento Universitario. Con un asado de por medio y con el objetivo de reforzar sus alianzas en el Congreso, el presidente recibió a Osvaldo Jaldo (Tucumán), Gustavo Sáenz (Salta), Raúl Jalil (Catamarca) y Hugo Passalacqua (Misiones), cuyas actuaciones son escrachadas y repudiadas en la actual ola de protestas en las universidades de todo el país.
A un mes del asado con "los 87 héroes" que votaron contra un miserable aumento a los jubilados, Javier "el Loco" Milei convocó a una cena en la Quinta de Olivos a cuatro gobernadores traidores del peronismo que lo ayudaron a convalidar el veto a la ley de Financiamiento Universitario. Con un asado de por medio y con el objetivo de reforzar sus alianzas en el Congreso, el presidente recibió a Osvaldo Jaldo (Tucumán), Gustavo Sáenz (Salta), Raúl Jalil (Catamarca) y Hugo Passalacqua (Misiones), cuyas actuaciones son escrachadas y repudiadas en la actual ola de protestas en las universidades de todo el país.
La breve y magra trayectoria política de Milei ya le está dando su primera lección: a menos de un año de asumir en el poder, ya no puede caminar por la calle. El "vuelto" le está llegando enseguida. La sociedad argentina está comenzando a mostrar su cansancio hacia la gran mentira libertaria y, también, hacia las medidas que se comprometió a soportar en pos de un futuro mejor. ¿Por qué? Porque Milei está haciendo abuso de poder y aplicando un ajuste que no recae sobre la casta, como había anunciado, sino sobre trabajadores y jubilados. En todos los rubros y en cada rincón, excepto -por supuesto- si se trata de los ricos y poderosos.
La bronca avanza. Estos últimos días, varias figuras del espacio oficialista comenzaron a recibir el impacto real de las políticas implementadas por un mandatario desquiciado que está decidido a destruir los derechos más elementales que determinan una vida digna: salud, educación, alimentación y empleo, con la complicidad de algunos gobernadores.
La "ministra del Hambre", Sandra Pettovello, fue escrachada en Ezeiza: "¿De qué te reís, ladrona? ¡Chorra! ¡Entregá los alimentos a los comedores!", le gritaron. Lejos de mantener la compostura, la integrante favorita del Gabinete libertario contestó con la violencia que los caracteriza: "Ganamos las elecciones, aguántensela, ganamos, jódanse". Lo cual desató la ira de los presentes, que le propinaron otra catarata de insultos.
El titular de la Cámara de Diputados, Martín Menem, fue otro de los personajes escrachados, en su caso, mientras caminaba por las calles de la capital santacruceña, donde fue abordado por un grupo de manifestantes que lo recibieron a los huevazos limpios. Como no podía ser de otro modo, el fiel soldado de la causa libertaria respondió con ironía, al estilo mileista.
"El Jefe" tampoco zafó de la embestida. La visita de Karina Milei, a La Plata en ocasión de un acto partidario ocasionó una batería de insultos y piedrazos por parte de un grupo de vecinos. A lo cual reaccionó negando el malestar social: "A todos los que quisieron que no hagamos el acto, quiero decirles que no nos van a frenar y que no les tenemos miedo". Todo lo que la actual administración libertaria intenta minimizar con frases despectivas se da por decantación: la violencia institucional creciente le vuelve como un boomerang. Cada vez más veloz y cada vez más frecuente.
Más allá del apoyo interesado de un grupo de gobernadores, hay una realidad que comienza a emerger por las medidas políticas implementadas desde diciembre hasta hoy. El veto al aumento jubilatorio y a la Ley de Financiamiento Universitario acentuaron el clima social de rechazo hacia Milei, y en consecuencia, se van diseminando semillas de mal humor social en distintos puntos del país, hacia un presidente al que el cargo le queda demasiado grande, cuya mente cruel le impide comprender que sin empatía social ni consenso, es imposible gobernar.
La Opinión Popular
PARTICIPARON LOS GOBERNADORES QUE APOYARON EL VETO AL FINANCIAMIENTO UNIVERSITARIO
Milei cenó con los "cuatro héroes"
Se trata de los mandatarios Jaldo, Jalli, Sáenz y Passalacqua. El Presupuesto 2025 y las obras públicas estuvieron en la charla. Milei busca ampliar su lista de aliados.
A Javier Milei le gusta festejar sus vetos a leyes que benefician a grandes sectores de la población. El primero festejo fue por el veto a la movilidad jubilatoria. Esa vez fue con diputados. La de anoche fue una cena más pequeña, más íntima quizá, porque esta vez se trata solo de cuatro gobernadores peronistas o panperonistas que acompañaron otro veto, esta vez el referido a la ley de Financiamiento Universitario.
Uno a uno fueron llegando los gobernadores Raúl Jalil de Catamarca, Osvaldo Jaldo de Tucumán, Gustavo Sáenz de Salta y el misionero Hugo Passalacqua. En el ingreso todos coincidieron en que su presencia tiene ver con la necesidad de garantizar diálogo y obras públicas. Sin duda, el gobierno busca con este encuentro garantizar votos a futuro en el Congreso. En el corto plazo está el apoyo al Presupuesto 2025 y, si alcanzan los tiempos parlamentarios, vetar cualquier reforma a ley de DNU.
"Vengo dispuesto a escuchar y pasar un rato de camaradería", dijo el catamarqueño Jalil poco antes de atravesar el característico portón verde de la residencia presidencial de Olivos. Extraño comentario, sobre todo cuando se trata de congratularse por el veto que perjudica a los docentes, no docentes y estudiantes de todas las universidades públicas. Incluso la de Catamarca.
Adentro, en la quinta, los esperaban --además del presidente Milei-- la secretaria General de la Presidencia, su hermana Karina Milei; el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, quien fue el encargado de la convocatoria; y el asesor Santiago Caputo.
El catamarqueño es el más nuevo de los gobernadores aliados. En cambio, su compañero Jaldo fue el primero en saltar la tranquera. Tanto es así que en su provincia ahora lo llaman "Jaldei", mitad Jaldo, mitad Milei. Por caso, el tucumano aclaró que llegó a la cena "sin tarjeta y sin plata, pero con muchos pedidos". En su momento le habilitó la provincia para que Milei pudiera implementar el llamado "Pacto de Mayo" que se hizo el 9 de julio pasado.
El tucumano suele repetir a sus colaboradores más íntimos que no quiere pelearse con Milei, que le teme a sus arrebatos y broncas, pero estos mismos colaboradores dicen que Jaldo es más libertario que peronista y no desde ahora.
El salteño Sáenz ingresó con una sonrisa de oreja a oreja. Afirmó, como los otros comensales, que venía para afianzar el diálogo con el gobierno y garantizar las obras públicas necesarias. Este es el tema que desvela a los cuatro mandatarios. Y todo eso está expresado en el texto del proyecto de ley de Presupuesto 2025.
Hasta ahora los cuatro mandatarios solo recibieron promesas de obras, de la conclusión de las que están casi finalizadas. A cambio, éstos le dieron respaldo a leyes que presentó la Casa Rosada, desde la ley Bases hasta el apoyo a los vetos con el costo político que eso pueda representar.
Sáenz fue el único que se permitió opinar sobre la interna del PJ. Si bien aclaró que no participará de la contienda partidaria por tener un partido propio (aliado a Sergio Massa), consideró que ya era hora de que el PJ se renueve y busque nuevas conducciones, en obvia referencia a Cristina Fernández de Kirchner.
La otra cena
Los gobernadores buscaron quitarle el calificativo festivo a la cena y que no se pareciera a la que protagonizaron los "87 héroes" que garantizaron el veto a la ley que le otorgaba una mínima mejoría a los montos que cobran los jubilados. En ese momento, el 16 de septiembre, sin pudor esos 87 se abalanzaron sobre los platos con asado para festejar que los jubilados eran más pobres.
Poco antes de ese encuentro, Milei había dicho que "87 héroes" le habían puesto "un freno a los degenerados fiscales que intentaron destruir el superávit fiscal". Para aquella cena, el gobernador de Tucumán mandó a sus diputados a cenar en Olivos. Allí estuvieron Agustín Fernández, Elía Marina Fernández y Gladys Medina. Ahora fue el turno de "Jaldei".
Fuente: Página 12