“Un país que destruye la Escuela Pública no lo hace nunca por dinero, porque falten recursos o su costo sea excesivo. Un país que desmonta la Educación, está gobernado por aquellos que pierden con la difusión del saber”. Ítalo Calvino
Los pilagás que sobrevivieron fueron tomados prisioneros.
El avión de la Fuerza Aérea utilizado para la masacre, que ametralló desde el aire a los pilagá durante una semana. El 10 de octubre de 1947, se inicia la represión contra los indios pilagá en Rincón Bomba, cerca de Las Lomitas, provincia de Formosa, a manos de Gendarmería. Se denuncian cientos de víctimas, en una represión que se extendió hasta finales de octubre de ese año.
La matanza fue perpetrada por fuerzas pertenecientes a Gendarmería Nacional, bajo el mando directo del comandante Emilio Fernández Castellanos y un avión de la Fuerza Aérea Argentina.
La masacre quedó impune y fue silenciada durante décadas, por el Estado y la cultura hegemónica en Argentina, permaneciendo en la memoria oral colectiva del pueblo pilagá.?
Medio siglo después, en 2005, la Federación del Pueblo Pilagá demandó al Estado argentino, obteniendo entre 2019 y 2020 el reconocimiento judicial del hecho como genocidio, así como la obligación del Estado de conmemorar el crimen y resarcir moral y materialmente al pueblo pilagá.
En 2006 se hallaron los restos de 27 personas en una fosa común junto a material compatible al usado por Gendarmería en esa época.
La Opinión Popular
Agentes de Gendarmería Nacional con niños del pueblo Pilagá.