Nacionales - 25-06-2024 / 10:06
LAS CONSECUENCIAS DEL BRUTAL AJUSTE ANARCO CAPITALISTA
El Loco Milei lo hizo: Se derrumba la industria, el comercio, la construcción y la inversión, lo único que crece es el desempleo
Bajo el desastroso gobierno de Milei, para bajar la inflación, se aplicaron medidas económicas que enfriaron la economía a tal punto que en el primer trimestre del año el derrumbe interanual fue brutal. El plan motosierra provocó una caída del consumo, fin de la obra pública y una fuerte suba en la desocupación por despidos. Nada indica que elijan cambiar el rumbo errado del feroz ajuste, pero las últimas manifestaciones masivas muestran que las fuerzas están para parar este ataque al pueblo trabajador.
Hay una realidad económica que las payasadas libertarias no pueden ocultar: se conocieron datos del Indec para el primer trimestre del año y sólo hay malas noticias para el modelo económico del "experto en crecimiento con o sin dinero". La economía se derrumba y al Gobierno sólo le queda recurrir a sus habituales fuegos artificiales.
La economía del primer trimestre de Javier "el Loco" Milei ya evidencia los resultados del "ajuste más profundo y acelerado de la historia", como lo califica el libertario. En el primer trimestre, el PBI cayó un 5,1% con respecto al de 2023, cuando el país atravesaba la sequía más grande de su historia. El derrumbe de la industria, el comercio, la construcción y la inversión ya se refleja en el índice de desempleo, que saltó del 5,7 al 7,7%. Los especialistas pronostican que esa tasa llegará este año a los dos dígitos.
El nivel de actividad económica, o Producto Bruto Interno, mostró en los primeros tres meses del año una caída del 5,1 por ciento con respecto al inicio del año 2023. Con respecto al trimestre anterior, el descenso es del 2,6 por ciento, que se suma a otra baja del 2,5 por ciento en el cuarto trimestre de 2023 con respecto al precedente.
Es decir, dos trimestres consecutivos de una recesión que se profundiza y se acelera, empezando a mostrar otras consecuencias. La desocupación empieza a crecer, consecuencia de la caída de actividad, alcanzando al 7,7 por ciento, pero con impacto aún más negativo en la población trabajadora femenina (8,4 por ciento).
Las estadísticas que publicó el Indec este lunes muestran, en la evolución trimestral, la violenta caída de la inversión del 12,6 por ciento, y un solo componente de la demanda que aumenta, que fue la exportación en un 11,1 por ciento. El consumo privado, en tanto, cayó 2,6 por ciento, y el público 0,8 por ciento. Es decir, que mientras la demanda local cae en todos sus rubros (consumo e inversión), la externa es la única demanda que crece.
De manera coherente, y tomando en cuenta la ausencia de políticas destinadas a impedir o dificultar los despidos, el desempleo escaló en apenas un cuatrimestre en dos puntos porcentuales en tanto se ubicaba en el 5,7% en el último trimestre de 2023 y llegó hasta 7,7% según el último informe oficial. El relevamiento del INDEC surge de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) que se realiza sobre una muestra representativa de los 31 conglomerados urbanos en los que viven poco más de 29,5 millones de personas. Allí más de un millón de personas carecen de empleo y lo buscan activamente.
Si el dato se proyectara al conjunto de los argentinos, la población desocupada llega hasta el 1.715.276. Así las cosas sólo en los tres meses que van de enero a marzo 416.551 personas perdieron su empleo y no pudieron reinsertarse en otra actividad. El dato desmiente la falacia de los fundamentos de la reforma laboral libertaria contenida en la ley Bases que indica que la precarización del empleo y la flexibilidad para despedir resultarán en una mejora del empleo y los salarios. Ocurre exactamente lo contrario.
Entretanto, el ególatra Milei, desde Praga, se auto postula para el premio Nobel en economía, porque piensa que está reescribiendo la teoría económica y se imagina ganándolo. No puede ser que estemos sufriendo esto mientras el Loco y Karina viven su fantasía paseando por Europa, cuando el país se derrumba.
La Opinión Popular
CAÍDA DEL PBI DEL 5,1 POR CIENTO ANUAL EN EL PRIMER TRIMESTRE
Se dispara la recesión al compás del plan de ajuste
El fuerte descenso en el consumo y la inversión son los factores que marcan el ritmo de achicamento de la economía, según lo reflejan las cifras oficiales. Como consecuencia, crece el desempleo.
El otro lado del producto bruto, la oferta, muestra en su variación interanual la contracara de lo que expone la demanda en sus diferentes rubros. La actividad productiva que más cae en este primer trimestre del año, en términos interanuales, es la construcción, en un 19,7 por ciento, lo cual explica la baja en la formación bruta de capital o fijo, es decir la Inversión, que alcanza al 23,4 por ciento.
En sentido inverso, las actividades que más crecen son las estrechamente vinculadas a la exportación. Agricultura y ganadería computan un salto en el año del 10,2 por ciento, mientras que el rubro Minas y canteras trepa un 8 por ciento. Se corresponde con un crecimiento interanual de las exportaciones del 26,1 por ciento.
No fue mérito de políticas públicas este aumento principalmente en el sector agrícola, sino más bien el resultado de la sequía histórica que sufrieron las zonas productivas en 2023, reduciendo sensiblemente el saldo exportable de granos. Ni siquiera la devaluación de diciembre de 2023, apenas asumido Javier Milei, puede atribuirse mérito sobre el mejor resultado de la campaña, ya que para esa fecha casi la totalidad de la siembra para la cosecha gruesa (maíz y soja) estaba ya realizada.
En cambio, esa megadevaluación sí tuvo un impacto directo, pero negativo, sobre la producción (oferta) y el consumo (demanda), las dos caras en las que se mide el producto bruto interno. La industria manufacturera tuvo una caída en el año del 13,7 por ciento. En el comercio (mayorista, minorista y reparaciones), el descenso interanual del nivel de actividad es del 8,7 por ciento. Otra actividad significativa por su incidencia en el PBI, la intermediación financiera, tuvo un retroceso del 13 por ciento.
La evolución negativa en estos sectores (industria, comercio y servicios financieros), junto a la de la construcción, explican en gran medida el aumento del desempleo. Y las proyecciones en las que coinciden cada vez más analistas, es que la segunda mitad del año estará marcada por un salto del desempleo que alcanzaría a los dos dígitos (el 10 por ciento) antes de finalizar 2024.
Un ejemplo de ello fue el alerta que representa el anuncio de Acindar a la UOM de Villa Constitución (Santa Fe) de que se extenderá drásticamente el paro de la planta siderúrgica de esa localidad ante la caída en las ventas. Lo que originalmente había sido un planteo de suspensiones por tres semanas, ahora se extendió a un cierre de la planta durante 120 a 135 días en el marco de los seis meses que quedan del año.
Se trata de una planta líder en el mercado local de capitales transnacionales y, por lo tanto, con anchas espaldas. En el caso de las pymes, diversas organizaciones del sector reconocen que el esfuerzo que vienen haciendo diferentes empresas para no afectar a su personal por la caída en las ventas, ya cedió para empezar a aplicar suspensiones. Y sin perspectivas de repunte para los próximos meses, prevén que inevitablemente habrá en lo inmediato reducciones masivas de planteles laborales. Es decir, despidos.
El estado de recesión económica en la que entró la economía, como suele ser habitual, también se vio reflejada en una caída de las importaciones del 20,1 por ciento en su comparación interanual (contra el primer trimestre de 2023). Ante la falta de demanda interna, se reduce la necesidad de oferta importada. Ambos componentes de los dos conjuntos con los que se mide el PBI (demanda global y oferta global) se achican simultáneamente cuando la economía entra en recesión.
Por Raúl Dellatorre
Fuente: Página 12