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“A muerte estoy con los jubilados. Lo que les hacen es una vergüenza. Yo defiendo a los jubilados ¿cómo no los voy a defender? Tenemos que ser muy cagones para no defender a los jubilados”. Diego Maradona
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Nacionales - 09-10-2009 / 19:10
EFEMÉRIDES POPULARES: MADURA EL 17 DE OCTUBRE DE 1945 (II)

El Coronel Perón y los trabajadores contraatacan

El Coronel Perón y los trabajadores contraatacan
Juan Perón hablando a los trabajadores.
En un día como hoy, el 10 de octubre de 1945, el coronel Juan Perón es forzado a renunciar a los cargos de Vicepresidente, Ministro de Guerra y Secretario de Trabajo y Previsión por la reacción oligárquica.
En un acto improvisado Perón -ya sin cargos- se despide de los trabajadores desde las antiguas oficinas de la Secretaría de Trabajo y Previsión en la calle Perú 160. La compañera Evita estaba presente.

Perón pronuncia un célebre discurso (que al final trascribimos completo) en el que detalla un avanzado programa de reivindicaciones laborales. Y deja también un mensaje de esperanza y su decisión de luchar. "Venceremos en un año o venceremos en diez, pero venceremos", sostiene.
 
Escribe: Blas García

Resumen de lo anterior
 
El 4 de junio de 1943, Juan Perón participó en la Revolución que terminó un proceso de fraude y corrupción política iniciado con el golpe militar de 1930 que derrocó al Presidente Hipólito Yrigoyen.
 
En el nuevo gobierno dirigió el Departamento Nacional del Trabajo dedicado a los asuntos laborales y sindicales. Desde este lugar inició su contacto con la clase trabajadora argentina comprendiendo sus problemas y necesidades.
 
Impulsó la organización de los trabajadores en sindicatos transmitiendo al movimiento obrero una visión reivindicadora del trabajo y promovió una legislación protectora inspirada en los principios de justicia social.
 
Por su desempeño comenzó a crecer la popularidad de Perón en la clase trabajadora lo cual despertó desconfianza en muchos de los mandos del Ejército que tenían una concepción conservadora y oligárquica de la sociedad argentina. A tal punto llegó esta situación que fue obligado a renunciar a todas sus funciones el 10 de octubre de 1945.
 
 
Se organiza la resistencia
 
El 10 de octubre a la mañana, los intentos del gobierno por esconder la crisis se diluyen y corren rumores de que existe intranquilidad en el ámbito gremial.
 
Al mediodía, el grupo sindical, que se reunió la noche anterior, entrevista a Juan Perón y se decide la realización de una concentración frente a la Secretaría de Trabajo y Previsión para que el Coronel se dirija a los trabajadores, al abandonar el cargo. Se ignora quién propuso ese acto que seria muy importante en el desarrollo posterior de los acontecimientos.
 
El evento se realiza en condiciones muy particulares: a) se convoca para el mismo día, no dando tiempo al enemigo para orquestar su respuesta; b) se obtiene la transmisión por la red oficial de radios, lo cual indicaría cierta complicidad del presidente Edelmiro Farrell.

En apoyo a Perón, al atardecer y en la esquina de las calles Perú y Alsina, alrededor de 70.000 trabajadores se nuclean, convocados por la CGT en torno a la Secretaría de Trabajo, desde donde habla el Coronel, por altoparlantes y en conexión con la radio oficial.

 
Desde un balcón, Perón pronuncia un célebre discurso en el que detalla un avanzado programa de reivindicaciones laborales. A []nuncia que deja dos decretos firmados, a favor de los trabajadores. Uno de ellos, establece un nuevo régimen de asociaciones profesionales- otorgándoles autonomía, entre otros derechos- y el otro, un aumento de sueldos y salarios, implantación del salario móvil, vital y básico y participación en las ganancias.
 
Sostiene, además: "Deseo manifestar, una vez más, la firmeza de mi fe en una democracia perfecta. Dentro de esa fe democrática, fijamos nuestra posición incorruptible e indomable frente a la oligarquía. Pensamos que los trabajadores deben confiar en sí mismos... No se vence con violencia, se vence con inteligencia y organización. Por ello, les pido que conserven una calma absoluta y cumplan con lo que es nuestro lema de siempre: del trabajo a casa y de casa al trabajo... Tranquilidad y calma es lo que necesitamos para seguir invencibles. Y si un día fuese necesario, he de formar en sus filas para obtener lo que sea justo. Mientras tanto, que sea la calma y la tranquilidad lo que guíe los actos de los obreros para que no se perjudique esta magnífica jornada de justicia social. Pido orden para que sigamos adelante nuestra marcha triunfal, pero si es necesario, algún día pediré guerra".


Y recurriendo seguramente a alguna lectura de Carlos Marx, sostiene: "La emancipación de la clase obrera está en el propio obrero".
 
Este discurso influye intensamente en los trabajadores, robusteciendo su entusiasmo y galvanizando su confianza. Pero, por supuesto, agrava la reacción de los sectores oposi­tores.
 

El discurso provoca fuerte irritación

 
En la oposición se juzga que ha sido un gravísimo error haber facilitado el micrófono, la tribuna y las radios, y que recién ahora puede evaluarse la peligrosidad de semejante agitador de masas.
 
Entre la dirigencia de la Unidad Democrática y en los altos mandos de la Marina crece la idea de que Farrell ha sido cómplice de Perón y que es imprescindible poner fin al gobierno militar: la Corte Suprema debe asumir el poder.
 
En cambio, en el Ejercito -aun en Campo de Mayo en donde reina grave irritación por lo ocurrido- prevalece la idea de sostener a Farrell, designar el nuevo gabinete y fijar fecha cierta para las elecciones. Es decir, el Ejército abandonará el poder pero dignamente y no reconociendo su fracaso, como ocurriría en caso de entregar el gobierno a la Corte.
 
Algunos jefes militares se sienten engañados por Farrell y Perón y exigen la remoción del presidente. Otros, como el mayor Desiderio Fernández Suárez -once años después responsable de la masacre de José León Suárez- reacciona con más furia y parado sobre una mesa del círculo Militar proclama: "Hay que matar a Perón". También el General Manuel A. Mora, en la Escuela Superior de Guerra, juzga necesario "organizar un plan de asesinato".

"La Razón" informa, esa misma noche: "Al conocerse la noticia de la renuncia de Perón, suben las acciones de los ferrocarriles en la Bolsa de Londres. También suben en Nueva York otros valores colocados en la Argentina".

 
 
Que los militares coordinen con los obreros
 
Esa noche, Perón vuelve a reunirse en la calle Posadas, con oficiales de su confianza. El coronel Juan Giordano recuerda que Perón le dijo que si los obreros salían a la calle podía desencadenarse una guerra civil. "¿Qué hacemos para evitarlo? le pregunté. Perón nos dio la siguiente directiva: -Pónganse de acuerdo con jefes y oficiales de la causa, para que las unidades militares de la Capital reciban a los obreros que salgan a la calle y coordinen con ellos la forma de operar. El resto de las tropas de San Martín y El Palomar deben evitar que Campo de Mayo marche hacia la Capital". Madura el 17 de octubre.
 
Escribe: Blas García
 
Fuente: Norberto Galasso. Perón - Formación, ascenso, caída (1893 - 1955) editorial Colihue.

 
  
 
Mensaje completo de despedida de Perón a los obreros concentrados en la Secretaría de Trabajo y Previsión
 
Ante miles de obreros y empleados concentrados ante la Secretaría de Trabajo y Previsión el atardecer del 10 de octubre de 1945, el coronel Perón les dirige un mensaje de despedida al abandonar la función pública. (Octubre 10 de 1945.)

Trabajadores:

 
Termino de hablar con los empleados y funcionarios de la Secretaría de Trabajo. Les he pedido, como mi última voluntad de secretario de Trabajo y Previsión que no abandone nadie los cargos que desempeñan, porque se me habían presentado numerosísimas renuncias. Yo considero que en esta hora el empleo en la Secretaría no es un puesto administrativo, sino un puesto de combate, y los puestos de combate no se renuncian: se muere en ellos.

Esta casa, fundada hace un año y medio se ha convertido en la esperanza de los hombres que sufren y trabajan. Esa esperanza no debe ser defraudada por nadie, porque acarrearía las mayores desgracias a nuestra patria. Despojado de toda investidura, hablo hoy a mis amigos los trabajadores expresándoles, por última vez desde esta casa, todo lo que mi corazón siente hacia ellos y todo lo que he de hacer en mi vida por su bien.


Si la revolución se conformara con dar comicios libres, no habría realizado sino una gestión en favor de un partido político. Esto no pudo, no puede, ni podrá ser la finalidad exclusiva de la revolución. Eso es lo que querrían algunos políticos para poder volver; pero la revolución encarna en sí las reformas fundamentales que se ha propuesto realizar en lo económico, en lo político y en lo social. Esa trilogía representa las conquistas de esta revolución que está en marcha y que cualesquiera sean los acontecimientos, no podrá ser desvirtuada en su contenido fundamental.


La obra social cumplida es de una consistencia tan firme que no cederá ante nada, y la aprecian no los que la denigran, sino los obreros que la sienten. Esta obra social que sólo los trabajadores la aprecian en su verdadero valor debe ser también defendida por ellos en todos los terrenos.

 
La Secretaría de Trabajo y Previsión acometió hace un año y medio dos enormes tareas: la de organizar el organismo y la de ir, sobre la marcha, consiguiendo las conquistas sociales que se consideraban más perentorias para las clases trabajadoras.
 
Sería largo enumerar las mejoras logradas en lo que se refiere al trabajo, a la organización del trabajo, a la organización del descanso, al ordenamiento de las remuneraciones y a todo lo que concierne a la previsión social. Esta tarea realmente ciclópea se ha cumplido con este valioso antecedente: las conquistas obtenidas lo han sido con el absoluto beneplácito de la clase obrera, lo que representa un fenómeno difícil de igualar en la historia de las conquistas sociales.

En el campo de la previsión social hemos comenzado, por realizar una propaganda sobre el ahorro -posible con los mejores salarios- y luego propugnamos por el incremento de las mutualidades. Se ha aumentado el número de los argentinos con derecho a jubilación, en cifras verdaderamente extraordinarias, y a este respecto cabe destacar la iniciativa de la Confederación de Empleados de Comercio, que constituye un triunfo y un motivo de orgullo para la previsión social argentina.


Hemos defendido desde aquí a todas las organizaciones obreras, las que hemos propugnado, facilitándoles su desenvolvimiento. Desde esta casa no se ordenó jamás la clausura de un sindicato obrero ni se persiguió nunca a un trabajador, por el contrario, siempre que nos fue posible pedimos a las autoridades la libertad de obreros detenidos por distintas causas.


A diferencia de lo que ha sucedido en otras partes o en otros tiempos, las autoridades han defendido a las organizaciones obreras en lugar de molestarlas o perseguirlas. Es así que terminamos de dictar un decreto-ley referente a las organizaciones profesionales.

 
Cuando llegué a la Secretaría de Trabajo, el primer pedido que recibí de los obreros fue la derogación de un decreto del año 1943, en el que se establecía para las asociaciones gremiales un régimen de tipo totalitario.
 
El primer decreto que firmé en esta Secretaría fue la derogación de ese reglamento; y tengo la satisfacción de decir que el último que he firmado es el nuevo régimen legal de las asociaciones profesionales, que difiere fundamentalmente del anterior. Y con respecto al cual puedo asegurar que es lo más avanzado que existe en esta materia.
 
Bastaría decir que bajo este cuerpo legal, el gobierno, que puede intervenir una provincia o una asociación de cualquier orden, no puede en cambio intervenir los sindicatos obreros.
 
También dejo firmado un decreto de una importancia extraordinaria para los trabajadores. Es el que se refiere al aumento de sueldos y salarios, implantación del salario móvil, vital y básico y la participación en las ganancias.
 
Dicho decreto, que he suscripto en mi carácter de secretario de Estado tiene las firmas de los ministros de Obras Públicas y de Marina, y beneficia no solamente a los gestores de la iniciativa -la Confederación de Empleados de Comercio-, sino a todos los trabajadores argentinos.

Y ahora, como ciudadano, al alejarme de la función pública, al dejar esta casa que para mí tiene tan gratos recuerdos, deseo manifestar una vez más la firmeza de mi fe en una democracia perfecta, tal como la entendemos aquí. Dentro de esa fe democrática fijamos nuestra posición incorruptible e indomable frente a la oligarquía.

 
Pensamos que los trabajadores deben confiar en sí mismos y recordar que la emancipación de la clase obrera está en el propio obrero. Estamos empeñados en una batalla que ganaremos porque es el mundo el que marcha en esa dirección.
 
Hay que tener fe en esa lucha y en ese futuro. Venceremos en un año o venceremos en diez, pero venceremos. En esta obra, para mí sagrada, me pongo desde hoy al servicio del pueblo y así como estoy dispuesto a servirlo con todas mis energías, juro que jamás he de servirme de él para otra cosa, que no sea su propio bien.

Y si algún día, para despertar esa fe, ello es necesario, me incorporaré a un sindicato y lucharé desde abajo.
Al dejar el gobierno, pido una vez más a ustedes que se despojen de todo otro sentimiento que no sea el de servir directamente a la clase trabajadora.

 
Desde anoche, con motivo de mi alejamiento de la función pública, ha corrido en algunos círculos la versión de que los obreros estaban agitados. Yo les pido que en esta lucha me escuchen. No se vence con violencia; se vence con inteligencia y organización. Por ello les pido también que conserven una calma absoluta y cumplan con lo que es nuestro lema de siempre: del trabajo a casa y de casa al trabajo.
 
No debemos por ninguna causa exponer la tranquilidad de un obrero o la felicidad de una familia. Hemos de luchar con inteligencia y organización, y así, el triunfo será nuestro.
 
Debo decirles que he hablado con el excelentísimo señor Presidente de la Nación, quien me ha prometido que la obra social realizada y las conquistas alcanzadas, serán inamovibles y seguirán su curso. Pido, pues, el máximo de tranquilidad a todos los trabajadores del país.
 
Tranquilidad y calma es lo que necesitamos para seguir estructurando nuestras organizaciones y hacerlas tan poderosas que, en el futuro sean invencibles. Y si un día fuese necesario he de formar en sus filas para obtener lo que sea justo. Mientras tanto que sea la calma y la tranquilidad lo que guíe los actos de los obreros para que no se perjudique esta magnífica jornada de justicia social.
 
Pido orden para que sigamos adelante en nuestra marcha triunfal; pero si es necesario, algún día pediré guerra. Y ahora quiero que demos una vez más ese ejemplo de cultura que han exhibido en esta ciudad las masas de trabajadores.
 
Les pido a todos que llevando en el corazón nuestra bandera de reivindicaciones piensen cada día de su vida que hemos de seguir luchando inquebrantablemente por esas conquistas que representan los objetivos que han de conducir a nuestra República a la cabeza de las naciones del mundo. Recuerden y mantengan grabado el lema "de casa al trabajo y del trabajo a casa" y con eso venceremos.

Para terminar no voy a decirles adiós. Les voy a decir "hasta siempre", porque desde hoy en adelante estaré entre ustedes más cerca que nunca. Y lleven, finalmente, esta recomendación de la Secretaría de Trabajo y Previsión: únanse y defiéndanla, porque es la obra de ustedes y es la obra nuestra.

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28-04-2025 / 09:04
Javier "el Loco" Milei regresó al país este domingo tras su viaje al Vaticano, donde participó de la misa de despedida del Papa Francisco. Pero el mandatario no trajo paz espiritual en su equipaje: apenas pisó suelo argentino, volvió a cargar con furia contra periodistas que reportaron su recalada tardía al funeral. Es que no llegó a la despedida del Papa porque se demoró en la escuelita de Benegas Lynch, donde los libertarios se disfrazan de catedráticos, se reparten premios y doctorados inexistentes. Y se las creen.
 
Desde su cuenta de X, el Presidente libertario escribió que "la gente no odia lo suficiente a los periodistas", citando una encuesta de Marcelo Bonelli sobre su polémica ausencia a la despedida a cajón abierto. A Bonelli lo tildó directamente de "mentiroso patológico", aunque no se privó de extender sus ataques a Diego Brancatelli, acusándolo de tibio y de usar "videos viejos" para criticarlo.
 
La ofensiva no quedó ahí. Milei también acusó a periodistas de "ciencia ficción y chimentos baratos de peluquería", compartiendo publicaciones de cuentas libertarias que sugerían que los medios mintieron deliberadamente sobre su presencia en la ceremonia papal. Es cada vez más evidente que el trastornado Milei quiere que uno de los legados de su presidencia sea la destrucción de la imagen de los periodistas frente a la opinión pública.
 
El sueño de Milei es que luego de su mandato la gente ya no use a los medios tradicionales para informarse sino que opte por los canales de streaming abiertamente jugados por las "ideas de la libertad" de mercado o en redes como X, controlada por su amigo Elon Musk.
 
En paralelo, mientras atacaba el periodismo en redes sociales, el Presidente entregó una nueva distinción al economista español ultra derechista y enemigo del Papa Francisco, Jesús Huerta de Soto, demostrando que la repartija de medallas inmerecidas sigue siendo una prioridad en su agenda internacional.
 
Huerta de Soto quien, cuatro días después de la muerte de Bergoglio, vino a la Argentina y dijo en un programa de televisión que el Papa "estaba equivocado", además de volver a insistir con la idea del "maligno en la tierra", un insulto que el Presidente argentino le profirió al sumo pontífice años atrás, además de decirle imbécil.
 
Después de la entrega de la condecoración, el "experto en crecimiento económico con y sin dinero" se fue a Olivos. Desde allí dedicó la tarde a repostear comentarios en contra del periodismo porque, según él, fueron los periodistas los que "inventaron" que llegó tarde a los homenajes que le hicieron a Francisco en Roma. Lo cierto es que el avión presidencial partió el viernes con demora por una ceremonia de agasajo que el presidente hizo al ignoto y delirante economista libertario Huerta de Soto. Eso hizo que el jefe de Estado llegara tarde y no estuviera presente frente al féretro abierto del primer Papa argentino de la historia. Un verdadero papelón.
 
Durante su estadía en Roma, Milei también declaró que el papa Francisco lo "perdonó" por sus guarangos insultos, asegurando que el sumo pontífice minimizó sus exabruptos como "un error de juventud". Un "perdón" totalmente incomprobable. Aun así, Milei no pudo evitar despedirlo a su manera: entre lagrimitas en la Basílica de San Pedro y berrinches de Twitter en Buenos Aires. Un verdadero imbécil.
 
La Opinión Popular
 

27-04-2025 / 10:04
La despedida de Francisco se convirtió en espejo de su papado. Más allá de la presencia récord de mandatarios, su sello distintivo fue la inédita presencia popular. Cientos de miles desbordaron la plaza de San Pedro y muchos de los elegidos de Bergoglio -pobres, reclusos y migrantes- acompañaron en primera fila el féretro. La escena se repitió en Buenos Aires, donde una enorme multitud le acercó su adiós.
 
En el Vaticano, las calles y pasajes ya estaban completamente bloqueadas y a las 8.30, una gran multitud había colmado el lugar donde recién unas horas más tarde comenzaría la misa exequial a cargo del cardenal Giovanni Battista Re. Viajaron hasta Roma desde todas partes del mundo. Más de 160 delegaciones: reyes, príncipes, presidentes, ministros, representantes de las Naciones Unidas.
 
También referentes de distintas religiones: budistas e induistas, valdenses, ortodoxos, metodistas, luteranos. Además, numerosos miembros de países musulmanes y, por supuesto, de la propia Iglesia Católica. Como un fiel reflejo de su papado, la presencia de pobres, migrantes y jóvenes terminó de transformar la masiva ceremonia en un acontecimiento histórico a nivel global.
 
En Buenos Aires la convocatoria fue hecha con un flyer donde se ve la imagen de Francisco saludando a una multitud imaginaria y de fondo la Catedral Metropolitana: "Misa por el eterno descanso del Papa Francisco" rezaba y abajo, en letra más pequeña, un llamado a una caravana alrededor de la Plaza de Mayo en acción de gracias.
 
Las líneas A, D y E de subterráneos fueron la vía principal por la que fieles de distintos puntos de la Ciudad se acercaron hasta el evento, aunque bajando una o dos estaciones antes debido al operativo de seguridad. Ya en la línea A podía adelantarse quienes, de manera moderada en número, se estaban acercando al evento: grupos parroquiales de barrios populares y grupitos de mujeres o parejas mayores de la clase media porteña.
 
Este es el caso de Beatriz, Esther y Norma que en una alegría solo de paseo dominguero respondieron de manera tajante que iban a la Misa por el Papa. La estación Piedras fue el destino final. Y allí al trío parroquial se le sumaron Ernesto, María y Jessica, una beba en cochecito, que venían desde el Bajo Flores a agradecer a Francisco al que llamaron "el cura de los pobres".
 
Entre ambos discursos hay una grieta o herida, como prefiere llamarla el arzobispo García Cuerva, que es tan discursiva como material: todos iban a despedir a "un" Francisco, aunque no pareció ser el mismo en las dos primeras respuestas de la mañana. Las acentuaciones y los tonos hablan.
 
Durante toda la semana fue casi imposible abstraerse del duelo colectivo por la muerte de Francisco. En lo que probablemente haya sido uno de sus mayores logros, el fenómeno afectó no sólo a los católicos: muchas personas de otros credos, incluso ateos y agnósticos, participaron con seriedad y empatía de esta despedida a quien ha sido calificado como "el argentino más grande de la historia".
 
Entre otras cosas, porque cuesta imaginarse quién podrá ocupar el lugar de este hombre, cuya voz poderosa abogaba por los marginados, los pobres, los migrantes y los ancianos desvalidos, en una época en que los líderes mundiales, como Donald Trump y Javier Milei, parecen competir a ver quién es el más canalla.
 
La Opinión Popular
 

26-04-2025 / 13:04
Argentina se encamina a los tumbos hacia una elección de medio término sacudida por los vientos huracanados de dos fenómenos de dimensiones colosales, entre la explosión simbólica del fallecido Papa argentino y la apuesta electoral descarada de la mayor entidad financiera del planeta. El papa Francisco y el Fondo Monetario, uno como expresión de un sistema que pone al ser humano en el centro y el otro que pone al mercado en ese lugar.
 
Es obvio que la política de un Papa no se juega en el plano de un país, ni en el de la política partidaria. Son dimensiones diferentes, pero resulta inevitable que un discurso tan referencial y cargado de valores espirituales, morales y humanistas repercuta en cada país y en cada partido. Sobre todo cuando además el origen de ese discurso potente es argentino.
 
Por otro lado, ante la decadencia del modelo de globalización neoliberal hegemonizado por Estados Unidos, las herramientas de ese poder hegemónico se hacen más evidentes, más descarnadas y exponen los sentidos que han tratado de ocultar o disimular.
 
Los préstamos del Fondo Monetario cobran intereses más bajos pero imponen medidas económicas que tienden a preservar la dependencia y la subordinación al orden hegemónico.
 
Las declaraciones públicas de Kristalina Georgieva --titular del organismo-- en las que hizo campaña por Javier Milei al señalar que esperaba que las elecciones se definieran por mantener el actual rumbo económico, fueron una intervención en los asuntos internos del país.
 
Pero además mostraron que el sentido de este crédito es de respaldo a la campaña electoral del gobierno anarco capitalista, similar al que se le concedió a Mauricio Macri antes de las presidenciales de 2017.
 
Si antes los directivos del Fondo Monetario trataban de aparentar alguna independencia de Washington y de los procesos políticos internos de cada país, estas declaraciones de Georgieva aparecen como una gran lamida de trasero a Donald Trump.
 
El crédito se suma en parte a la deuda externa con ese organismo que a esta altura es materialmente imposible de pagar sin arruinar al país.
 
Así como el fallecido Papa era nacido y criado en Argentina, Argentina es el país que tiene casi la mitad de la deuda de todo lo que ha prestado el FMI en el planeta. Argentina es el mayor deudor del Fondo, con un PBI que no pasa del promedio.
 
En Argentina nació y se crio quien se anuncia en lo inmediato como un símbolo de independencia y justicia social y al mismo tiempo es la más encadenada a políticas de desigualdad y dependencia. Argentina forjó al actual símbolo de la justicia social y al mismo tiempo sufre la intervención inusitada de la titular del Fondo a favor del Gobierno.
 

26-04-2025 / 10:04
¿Se perdió el avión o la dignidad? El presidente Javier "el Loco" Milei arribó a Roma este viernes con la intención de rendir homenaje al papa Francisco, pero llegó tarde al cierre del velatorio público en la basílica de San Pedro, impidiéndole participar en el último adiós al Sumo Pontífice. El avión presidencial ARG-01 aterrizó en el aeropuerto de Fiumicino a las 19:00 hora local (14:00 en Argentina), justo cuando se clausuraban las puertas del templo vaticano, que durante días recibió a cientos de miles de fieles. El único presidente que no podía faltar por ser el representante del país donde nació el Papa, no llego y es un papelón mundial.
 
En contraste a este papelón mundial, el cartonero argentino Sergio Sanchez, amigo personal del Papa sin recursos económicos, llegó a tiempo y pudo despedir a su amigo. Milei con todos los recursos del Estado a disposición no llegó y no pudo entrar a la despedida del Papa Francisco en la Basílica de San Pedro porque se demoró en un acto de anarcocapitalistas en la escuelita de Alberto Benegas Lynch (hijo y padre).
 
El libertario estuvo en la tarde noche del jueves en la Escuela Superior de Economía y Administración de Empresas (Eseade), fundada por el padre de Bertie en 1978. Allí lo esperaron el propio "prócer liberal", como lo define el presidente, junto al economista español anarco capitalista Jesús Huerta de Soto, uno de los enemigos del Papa fallecido y uno de los héroes de Milei, al menos por el momento.
 
La Eseade no aparece en los rankings académicos internacionales más conocidos (como QS, THE o ARWU), sin embargo, por este instituto pasaron figuras de renombre mundial como las del propio Milei, Manuel Adorni y Juliana Santillán, la diputada que tiene un diploma en economía austríaca. En el acto en la Eseade, Milei se calzó la toga de "doctor" con los colores de Newells con la que los egresados de esa escuela suelen ser reconocidos por la calle.
 
Como el discurso que le dedicó al ultra derechista español, a quien recibirá en la Casa Rosada a su regreso de Roma, se demoró por más de 40 minutos, su viaje a la Santa Sede sufrió un retraso que le impidió llegar con tiempo a entrar a la Basílica en la que estuvieron otros líderes como el francés Emmanuel Macron y el brasileño Lula da Silva. Tampoco llegaron tarde otros 250 mil fieles que fueron a despedir al Santo Padre.
 
Milei aterrizó en Roma acompañado por su hermana Karina y una comitiva de 35 personas, pero sin tiempo ni protocolo para ver por última vez al Papa que antes llamó "representante del maligno". Su reciente "devoción" no alcanzó para llegar a tiempo al último adiós del Papa Francisco. Mientras en la Basílica de San Pedro se cerraba el féretro del primer pontífice argentino, el Presidente estaba en Buenos Aires premiando a otro economista libertario ignoto y lanzando frases grandilocuentes sobre la destrucción del Estado.
 
El contraste fue brutal: mientras el mundo despedía al líder espiritual de millones, el Presidente argentino priorizó una cátedra libertaria y un premio pedorro simbólico, para después volar sin pena ni gloria a un funeral donde ya no se puede ver al Papa. Ah, y por cierto: no tiene agenda oficial en Roma, más allá de estar presente en el funeral. Parece que eso de "el argentino más importante de la historia" tenía poco convencimiento.
 
La Opinión Popular
 

25-04-2025 / 11:04
La relación entre Javier "el Loco" Milei y el Papa Francisco fue, desde el inicio, una catarata de insultos, desprecio y declaraciones dignas del archivo más oscuro de la política argentina, por parte del libertario. Luego del insulto a los abrazos: Milei pasó de llamar "sorete mal cagado" al Papa a despedirlo con palabras de respeto, luego de haberlo visitado en el Vaticano entre sonrisas y elogios. ¿Alguien puede creer en el arrepentimiento del desquiciado por sus dichos sobre el Papa? 

En múltiples entrevistas y publicaciones en redes sociales, el actual presidente no dudó en calificar al sumo pontífice con términos como "zurdo hijo de puta", "empobrecedor", "representante del maligno" e incluso llegó a insultarlo con la frase "sorete mal cagado". Un informe, basado en publicaciones analizadas entre el 14 y el 18 de agosto del año 2023, revela cómo los dichos del por entonces guarango candidato de ultraderecha generaron un fuerte repudio social. El estudio muestra cómo sus ataques contra el Papa datan desde 2016 y que nunca fueron tibios: siempre se trataron de agresiones personales cargadas de violencia verbal.

Sin embargo, luego de su victoria en las elecciones, Milei pareció descubrir que la fe mueve votos. Su discurso cambió de manera abrupta: pasó de tratar al Papa como enemigo público a decir que lo respetaba "como jefe de la Iglesia Católica". Incluso, en una visita oficial al Vaticano, se mostró sonriente, le pidió un abrazo y posó como si nada hubiera pasado. La hipocresía quedó inmortalizada en la foto del apretón de manos con quien antes consideraba "el maligno en la Tierra".
 
Este lunes, tras conocerse la noticia del fallecimiento de Francisco, Milei volvió a la hipocresía de vestirse de cordero. En redes sociales y en declaraciones públicas expresó su "respeto" y "dolor" por la partida del líder espiritual. Antes de viajar a Roma dijo que el Papa fue el "argentino más importante", pero no fue a ningún homenaje. Pero el archivo no perdona, y tampoco las redes: millones de usuarios recordaron la violencia que supo lanzar contra quien ahora despide con palabras amables.
 
¿Por qué Milei, que detestaba y hasta insultaba al Papa, gasta dinero público de todos nosotros para viajar a Roma a despedirlo? Milei, que tras la muerte del Papa Francisco no fue a ninguna misa en su homenaje, ahora viajará con casi la mitad de su gabinete al Vaticano, donde participará de la misa exequial del sumo pontífice y, además, el cholulo buscará cruzarse con el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, para sacarse una foto con su Jefe.
 
Si bien desde su entorno admitieron que Milei no asistió a los homenajes del Papa en Buenos Aires "porque no tuvo ganas" y mientras que los referentes de la tropa digital libertaria rentada repitieron hasta el cansancio que Francisco "era comunista" y que "estaba equivocado", el Presidente quiso mostrar otra cara antes del viaje, con el único objetivo de sacar rédito político de un hecho que generó una conmoción internacional. ¿Quién los invitó?
 
Cuatro días después de la muerte de Bergoglio, salió a declarar que el funeral del Papa se trata de "un evento extremadamente importante porque, le guste a quien le guste, el papa Francisco ha sido el argentino más importante de la historia". Luego agregó: "estamos hablando de una persona de una envergadura enorme y tuvimos el privilegio que sea argentino". Cinismo al palo. Borró con el codo lo que escribió con la mano. A veces la muerte sirve de espejo. Y el reflejo de Milei es patético.
 
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