Nacionales - 16-03-2012 / 09:03
POR AHORA NO HABRÁ AYUDA EXTRA DESDE LA NACIÓN
Admiten en provincias la escasez de fondos
Preocupado. El justicialista José Alperovich, gobernador de Tucumán, fue contundente respecto de las señales de alerta.
En medio de la marea de negociaciones salariales con los gremios, crece la preocupación entre gobernadores por los problemas de caja, que complica ya en algunos distritos el acceso a los recursos necesarios para pagar los sueldos.
Si bien el malestar no fue amplificado hasta ahora de manera masiva por los mandatarios, el justicialista José Alperovich (Tucumán) fue contundente respecto de esas señales de alerta, como parte de la argumentación destinada a ponerle un coto a las pretensiones de los sindicatos locales.
"Llegué de Buenos Aires, y luego de hablar con gobernadores de otras provincias y con el ministro de Economía de la Nación (Hernán Lorenzino) uno se da cuenta, realmente, de que la situación que están pasando las provincias es muy grave", advirtió.
En esa línea, el titular del Ejecutivo norteño remarcó que «la recaudación ha bajado». «Estamos en un momento límite en el que no hay plata», enfatizó, y anticipó además que «por ahora» no habrá ayuda extra desde la Nación.
«No hay ayuda, la recaudación está viniendo floja, ya hay provincias con problemas para pagar los sueldos y a nosotros nos va a tocar también», resaltó. «Tengo que ver cómo haré para pagar los sueldos», remató.
Mensaje
Las declaraciones de Alperovich fueron un tiro directo a parte de los gremios tucumanos (como los estatales, los trabajadores de la salud, los municipales y los policías autoconvocados), que exigen subas de más del 30%. En cambio, ya selló un acuerdo con docentes que contempla un incremento del 20%
«No quiere decir que no estemos dispuestos a dar aumentos, pero es un momento muy difícil en el que tenemos que tener mucha serenidad y mucha cautela: nadie quiere volver al Tucumán de antes, en el que se daban aumentos pero no se podían pagar los sueldos», disparó.
Este escenario recrudeció en las últimas semanas con los reclamos de gobernadores que no comulgan con el kirchnerismo -o que arrastran entuertos partidarios- en pos de que la Casa Rosada salde deudas o reclamos de fondos por cerca de 20 mil millones de pesos.
Ayer dos integrantes de ese lote -el peronista crítico José Manuel de la Sota (Córdoba) y el socialista Antonio Bonfatti (Santa Fe) compartieron una cumbre de la Región Centro en Paraná, junto al otro socio del trío de provincia, el mandatario kirchnerista Sergio Urribarri.
En ese marco, el cacique mediterráneo aseguró que no habrá un reclamo de manera conjunta en torno a moras en remesas nacionales.
Unilateral
«La relación de cada una de las provincias con el Gobierno nacional es unilateral y debe ser así; lo que reclamamos en conjunto son las obras de infraestructura que son importantes para la región», afirmó con diplomacia De la Sota.
Tras una profundización en 2011 de los cortocircuitos políticos por la falta de acuerdo en materia de candidaturas, la Casa Rosada cerró los grifos nacionales y ahora Córdoba reclama una deuda de cerca de $ 1.700 millones en recursos previsionales y de obra pública.
En las últimas horas, el gobernador describió el duro escenario. «Humildemente, creo que ninguna otra provincia soportaría una acreencia de 1.700 millones y aún así poder seguir funcionando; esa es la fortaleza de Córdoba», destacó.
Fuente: ambito.com