Nacionales - 12-03-2012 / 09:03
SE QUEJAN PORQUE LA CASA ROSADA CADA VEZ TARDA MÁS EN GIRARLES
Malestar de las provincias por falta de fondos
El Estado se atrasa con obras públicas, de viviendas, escuelas y caminos, y con las deudas contraídas con provincias.
Los gobernadores e intendentes comenzaron a plantear duras quejas ante el gobierno de Cristina Kirchner porque los giros del Tesoro nacional a las provincias llegan con demoras y con cuentagotas.
La Casa Rosada descuenta que ese fenómeno se agudizará en el segundo semestre por una desaceleración de la economía y una caída en la recaudación fiscal, según confiaron altas fuentes oficiales.
Las provincias más urgidas son Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba y Mendoza, y la crisis afecta también a cientos de municipios.
Los giros de fondos, acusan, son tardíos y escasos. Además, el Estado se atrasa con obras públicas, de viviendas, escuelas y caminos, y con las deudas contraídas con provincias.
Por ello, principalmente, Cristina Kirchner apurará pasado mañana en la Cámara de Diputados -luego será girada al Senado- la sanción por ley de la reforma de la Carta Orgánica del Banco Central (BCRA). Necesita ampliar la disponibilidad de recursos.
El Gobierno prevé así usar US$ 3000 millones de las reservas para pagar deuda y 50.000 millones de pesos más de los adelantos transitorios para financiar al Tesoro nacional. Una caja adicional.
"Estábamos muy atados, en el segundo semestre de 2012 se prevé una desaceleración económica y la recaudación tiende a caer. Esto es una previsión, un colchón", dijo una alta fuente oficial a LA NACION.
Además, con la apertura de la caja del BCRA se buscará aplacar la caída de popularidad de Cristina Kirchner por las sucesivas crisis: conflictos salariales, paro docente, pelea con el Hugo Moyano, piquetes en demanda de planes sociales, el caso Boudou-Ciccone y la tragedia ferroviaria de TBA, que dejó 51 muertos.
"Es la nueva estrategia de Cristina para obtener mayor disponibilidad de recursos y ampliar la capacidad de operación y maniobra sobre los gobernadores y las otras crisis", dijo un funcionario.
El Gobierno evalúa también desacelerar la quita de subsidios al gas, la luz y el agua para no irritar a sectores medios y bajos en un mal contexto económico.
Se iban a eliminar 25.000 millones de pesos de los 75.000 millones de los subsidios. Pero el ahorro no iba a alcanzar a cubrir necesidades de caja y el costo político era alto. Por ello, la "sintonía fina" dio paso a "sintonía gruesa". El cambio en el Banco Central permitiría revisar gradualmente la quita de subsidios a sectores medios, una porción importante del electorado de Cristina Kirchner. La contracara de las tarifas baratas sería un aumento de la inflación superior al 25%. Pero la crisis ferroviaria y docente ya le restó diez puntos de su imagen positiva. Y no quiere seguir perdiendo.
"Si estas crisis se producen en medio de ajustes y deterioro económico serían inmanejables. El Central dará capacidad de operación", reconoció a LA NACION un alto funcionario.
Quejas
"Los gobernadores se quejan de que no les llega el dinero. la cadena de la felicidad es el poder de persuasión", ironizó otro allegado a Cristina Kirchner. Se refería al disciplinamiento de las provincias.
Del total de recursos nacionales, la Nación sólo distribuye el 26% de coparticipación a las provincias en forma automática. Del 74% restante envía más transferencias no automáticas (ver aparte), discrecionales, que se usan para disciplinar gobernadores. Y son las que se resintieron.
El gobernador de Santa Fe, Antonio Bonfatti, anunció que emitirá Letras del Tesoro para financiar deuda y pagar sueldos estatales. Además, hará una reforma tributaria para mejorar ingresos.
Cerró 2011 con un déficit de 1690 millones de pesos y ahora necesita 2700 millones por los aumentos salariales. Además quiere apuntalar las obras públicas que se frenaron.
En Rosario, Bonfatti aseguró que varios gobernadores le confesaron sus penurias, que no revelan en público para no enfrentarse a Cristina Kirchner. Y aseguró que el gobernador de Buenos Aires, Daniel Scioli, le dijo "que veía un panorama muy preocupante".
La deuda previsional de la Nación con Santa Fe es de 8000 millones de pesos.
A Córdoba, el Gobierno le debe 1500 millones. El gobernador José Manuel de la Sota deambuló por la Casa Rosada hace una semana sin encontrar respuestas. Y la coparticipación también se le demoró.
En los despachos cercanos a los de Scioli dicen que los intendentes y otros gobernadores le transmiten la misma inquietud semanalmente.
Por esa escasez, el 29 de diciembre último Cristina prorrogó por dos años el plazo de gracia de las deudas provinciales con la Nación.
Pero Macri sufre cuando Cristina Kirchner le quiere traspasar por ley del Congreso el subterráneo (que le cuesta 700 millones de pesos por año) y las 33 líneas de colectivos (1000 millones). Ella busca enfrentar a la Ciudad con las provincias, que recibieron una señal de la Casa Rosada: tras la reforma del Central se aliviará la situación de todos, menos la de Macri, principal adversario electoral para el Gobierno con miras a 2015.
"El Gobierno está en una coyuntura crítica pero con estrategia general favorable", resumió un allegado a Cristina Kirchner. El 2012 será duro, pero apuestan a que el BCRA compensará la caída. La presidenta del Central, Mercedes Marcó del Pont, aportará los recursos, sostienen. El secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, evita la salida de dólares para cuidar las reservas con el freno a las importaciones.
Se ilusionan con el aumento del precio de la soja, un repunte de Brasil y más crecimiento en 2013. Con ese combo como escenario, Cristina Kirchner apuesta a ganar las elecciones legislativas.
Por Mariano Obarrio
Fuente: LA NACION